PARAGUAY. El drama de la tierra,
principal desafío para reestablecer la
democracia
Hector
Sandler, Profesor Consulto, Derecho, UBA.
INTRODUCCION
Hoy Domingo 21 de Abril de 2013, en el
diario La Nacion
con motivo de las elecciones que hoy se celebran en el Paraguay aparece una
nota informando sobre “los contrastes de
un pais que no logra aplacar la pobreza extrema”. El informe es brindado sin
tendencia ideologica. Se limita a transcribir las opiniones de algunos
entrevistados y a resumir en un cuadro grafico la “estructura socio / económica
del Paraguay. Nosotros reproducimos abajo ese cuadro , pues muestra en uno de
sus ítems (propiedad de la tierra agraria) la más terrible distorsion existente en el Paraguay moldeada por
el derecho positivo vigente. Este derecho (y el orden económico por él
“constituido”) es causa del fracaso de la democracia alli donde ese tipo de
derecho rige. Es un “arreglo legal” que facilita a muy pocos el acceso a inmensas extensiones de tierra,
mientras priva de esa tierra a la
totalidad de los trabajadores. En
especial a los agrarios, pero no solo a éstos sino a todos. Piénsese en lo
difícil que es para un trabajador urbano adquirir un lote de tierra..
El derecho positivo que asegura a muy
pocos ser propietarios de tierra y que embolsen para si la renta
del suelo , es la causa por la que millones de trabajadores no puedan
acceder al suelo (rural y urbana) y que
sus salarios mermen
sistemáticamente (inflación).
Es ese mismo tipo de derecho positivo el
que obliga a que el gobierno sea un succionador de los salarios de los trabajadores y consumidores mediante
una ristra interminable de impuestos., el IVA a la cabeza. Este regimen legal comun
en toda Latino America copio al Derecho Civil de Roma. Este derecho positivo (
y no los bárbaros) fue la causa de la implosión del Imperio Romano. Es una fantasia querer gozar de un sistema politico igualitario y democrátIco
de hombres libres con ese derecho.
Veamos ahora la información periodística
primero y el cuadro que revela la estructura basal de la sociedad paraguaya.
LA
INFORMACION PERIODISTICA
ASUNCIÓN (De un
enviado especial).- Federico Benítez, de 17 años, sonríe y juega asombrado con
el agua caliente que sale de la canilla del baño en su pobre rancho de madera y
chapas ubicado a pocas cuadras del Palacio de Gobierno de Asunción, en la villa
miseria conocida como Chacarita, sobre un barranco que da al río Paraguay.
Llegado apenas
hace dos meses a esta ciudad, proviene de Canindeyú, cerca de la frontera con
Brasil. Pero en el rancho que compartía allá con sus padres y siete hermanos,
jamás hubo agua caliente. "Para bañarnos nos metíamos al río",
explica, intérprete de guaraní mediante. Aunque afirma que terminó la escuela
primaria, su manejo del castellano no alcanza para mantener una conversación.
El departamento
(provincia) de Canindeyú es uno de los que más se ha enriquecido con el boom de la soja, pero
ese beneficio solamente es aprovechado por los agricultores tecnologizados, en
su mayoría brasileños.
El campesino tradicional
paraguayo sigue aún realizando a mano todas las tareas rurales. "Mi
familia tiene una chacra en la que producimos mandioca, maíz, algodón y tenemos
también chanchos. Pero es muy poco lo que se gana", dice Federico. Para
apoyar la economía familiar, el joven hacía changas esporádicas en otras
granjas ayudando en la cosecha. Pero, cuando había trabajo, los jornales no
superaban los 35.000 guaraníes (unos ocho dólares).
Así fue como,
junto con su hermana, se decidió hace dos meses a subirse a un ómnibus y hacer
el viaje de siete horas a la capital, donde se alojó en la casa de un compañero
de su nuevo trabajo. Juntos se dedican a la albañilería, donde tiene un ingreso
asegurado de 60.000 guaraníes diarios (unos 14 dólares).
La historia de
Federico es la de miles de paraguayos de zonas rurales que viven en la
indigencia.
Una historia en
paralelo totalmente diferente es la que viven los agricultores tecnologizados
del campo paraguayo.
Ulrich Bauer es
el presidente de la
Cámara Paraguaya de Exportadores de Cereales y Oleaginosas
(Capeco). Y su asociación disfruta de la época de vacas gordas.
Paraguay está en
el tercer lugar del continente en la producción de soja, maíz y girasol. El 70%
de todos los ingresos por exportaciones del país proviene del campo.
"La
agricultura mecanizada se extendió mucho en Paraguay, pero no alcanzó a todos
los agricultores. La mayoría de los que se dedican a la agricultura mecanizada
son los inmigrantes brasileños, y los paraguayos se han quedado con la
agricultura manual. Falta la transición del campesino paraguayo", explica
Bauer a LA NACION.
En el particular
sistema tributario paraguayo, además, los agricultores tecnologizados y los
exportadores de cereales se ven ampliamente beneficiados. No existen
retenciones por estos rubros y su aporte tributario está únicamente vinculado
al IVA.
De esa manera,
el Estado no cuenta con ingresos para que la época de bonanza llegue a todos.
Además, el gasto social de Paraguay, cerca del 8% del PBI es el más bajo de
toda América latina.
Así, aunque el
país viene creciendo a ritmo sostenido en los últimos años, la pobreza extrema
-personas cuyos ingresos no cubren la canasta básica- se mantiene en los mismos
niveles desde hace más de tres décadas, cerca del 20% del total de pobres.
Solo hubo una
pequeña variación en los índices generales de pobreza, que entre 2002 y 2011 se
redujeron del 49 al 32%.
El ex ministro
de Finanzas del Partido Liberal, César Barreto, dijo a LA NACION que la "teoría
del derrame de la copa" de la riqueza funcionó en Paraguay, pero no como
se esperaba.
"Los
beneficios de la riqueza no se han volcado al campo, sino al comercio y los
servicios, dos sectores que crecieron mucho en estos años", señala
Barreto.
"Aquí se
necesitan políticas sociales muy concretas. No hay otra alternativa",
concluye.
Parte del texto
del articulo y el cuadro que corre en la nota impresa (al que acabamos de transcribir
agregando un par de datos surgidos de la entrevista) ilumina al lector sobre a los dañinos efectos
que causa a los trabajadores la “apropiación
de la renta de la tierra por parte de unos pocos” y el “recurrir a impuestos al trabajo y el
consumo” (IVA) sufridos oir la mayoria la la población trabajadora para afrontar el gasto publico.
Este acto de
democracia electoral solo tendra sentido
para el n el Paraguay si el gobierno electo aplica toda su energia para reformular la fuente del
tesoro publico. Es matemáticamente simple: por ley debera : recaudar un tanto
por ciento del valor real de la tierra ( para asi recuperar a la renta del
suelo) y simétricamente eliminar los impuestos al trabajo y al consumo. El
gobierno que viene enfrentara 2 problemas: 1) cientifico: conocer las leyes
ontologicas que modelan la realidad
social . 2) Que ese conocimiento sea difundido para templar el alma de la población
para que todos pongan su voluntad en accion para hacer que la “reforma social”
de sentido y continuidad a la democracia politica.
ESTRUCTURA BASAL CAUSADA POR EL DERECHO POSITIVO
|
Poblacion =7 millones (
+ 500.000 emigrados solo a la
Argentina)
Religion = 96.26 % cristianos (90% catolica +
6,26 Evangelica); 3,8 % Otras
Ingreso per capita = u$s
4825
Capacidad de producción agrícola=:
Tiene el 3er.lugar en America como exportador soja, maiz y girasol. El 70% de
los ingresos provienen de la exportacion.
Desempleo = 7% población
Deuda pública = u$s 2300
millones ( cada persona debe 329 dolares)
Pobreza: 49.5 %
Principal impuesto= IVA
CONCLUSION
¿Podrá entonces ser reestablecida la democracia política en el Paraguay, si
su derecho positivo fractura a la sociedad
en dos grupos tan diferentes en cuanto su posibilidad de acceder al
suelo? No debemos engañarnos. No es posible.
Cuando
el derecho positivo genera una sociedad en que apenas el 1% puede ser
“dueño de tierra”, mientras el 99% restante integra la legión de los “sin tierra rural y urbana” (en cuanto ella
no puede ser adquirida por el trabajo),
la democracia política no es viable. Carece su principal sustento material: la democracia
económica.
Si el derecho no asegura la
igualdad económica de oportunidades para que cada uno pueda vivir de su trabajo, la democracia es sustituida por la demagogia
y el clientelismo cuando no por algún tipo de dictadura.
Buenos Aires 21 de abril de 2013
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