Cuando la mitad de las personas llegan a la conclusión de que ellas no tienen que trabajar porque les basta con las ganancias obtenidas por el aumento del valor de la tierra de la cual son propietarias y esto obliga a los trabajadores a hacerse cargo de ellas y mantenerlas pagando crecientes alquileres, por no tener acceso a la propiedad por el elevado valor de la tierra; LA TRAMPA ESTA ECHADA. Pronto los trabajadores se convencerán de que no vale la pena trabajar porque alguien les quitará mediante crecientes alquileres e impuestos lo que han logrado con su trabajo. Pronto cerraran sus negocios y marcharan a las villas. Eso, mi querido amigo, es el fin de cualquier nación.. No se multiplica la riqueza atacándola con impuestos. La riqueza se multiplica eliminando impuestos y reemplazándolos por "rentas" que impedirán la perversa especulación sobre tierras que es la madre de todos nuestros problemas. Por Guillermo Andreau www.elrelativismojuridico.
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